26 de noviembre:
No dejes que la mente te haga trucos. No pienses que amas, deja que el amor fluya libremente. Él es un poder que está por encima de ti.
Nos engañamos a nosotros mismos al pensar que amamos. Porque en el momento en que piensas que amas, has dejado de amar.
Graba esto en tu mente con mucho cuidado: En el momento en que piensas «Yo amo», has dejado de amar. Porque aunque la mente interpreta es demasiado imperfecta para interpretar aquello que es tan infinito, tan poderoso, tan universal. ¿Cómo podría ser capturado entre los estrechos confines de la mente?
Amar por el hecho de amar, no porque seas rica o bella. O amar porque tienes algo que necesito. La mente sabe de necesidades, el corazón no.
Puedes tener la necesidad de depender, puedes tener dependencias emocionales, puedes tener dependencias físicas. Ves a personas que permanecen juntas durante años por dependencias físicas. Y esto no es otra cosa que la mente involucrada con los sentidos. O el ser sensual del hombre. Eso no es amor.
La mente gasta bromas consigo misma, sobre sí misma. Entonces nos empezamos a creer que «Yo amo».
No puedes creer que amas. El amor simplemente es; no requiere de ninguna creencia.
Ama
El amante verdadero no sigue ninguna religión,
de eso debes estar seguro.
Pues en la religión del amor,
no hay irreverencia o fe nula.
Cuando enamorados,
el cuerpo, mente y alma ni siquiera existen.
Conviértete en esto,
enamórate,
y nunca más seras separado.
– Rumi