2 de diciembre:
¿Qué hago entonces? ¿No hay nada que pueda hacer para abrirme a la experiencia del amor?
Cuando preguntamos cómo abrir el corazón, pensamos necesariamente en las circunstancias que nos encontramos. «Estoy en tal posición… ¿Qué hago?» Yo te diría: no hagas nada.
No intentes excitar al corazón porque no puedes. Lo que puedes hacer es vivir y pensar correctamente. Vivir de acuerdo a los mandamientos de las escrituras, de tal manera que creas un marco en tu existencia. Viviendo positivamente, siguiendo los consejos de cualquiera que sea la religión que sigas, porque ninguna de ellas te enseña a ser malo, crearás situaciones que te conducirán a la experiencia de lo que es el verdadero corazón.
A través de una vida donde te esfuerzas plenamente por ser positivo, a través de una vida discriminativa, creamos a nuestro alrededor un «aura», una fuerza magnética, un tirón magnético que nos traerá lo que necesitamos para ese momento.
El hombre sólo atrae hacia sí mismo lo que merece. Eso es todo, ni más ni menos. Nada por nada y muy poquito por seis peniques.
Atraemos lo que nos merecemos y ahora.. ¿que hacemos?
Lee para comenzar los pensamientos que para este día trae Respuestas al corazón en la página 258. Mira un poco hacía atrás, los días que llevamos recorridos, las perspectivas que hemos ido exponiendo.
La propuesta es: Deja que el corazón fluya libremente, déjate llevar por el fluir de la vida, acepta tus circunstancias, hazte responsable de ellas, es decir reconoce que tienes la habilidad de responder a ellas adecuadamente y no hagas nada más.
Se bueno, haz el bien, y ve respondiendo de corazón y con total honestidad a la vida según caminas por ella. Tienes la habilidad inherente para hacerlo. Y esto viene determinado por la ley natural. Lo que atraemos, lo atraemos por las leyes de la naturaleza que operan siempre preservando el equilibrio.
Por hoy nada más, las ideas que propone hoy Respuestas al corazón son auto-explicativas. Las técnicas de meditación y prácticas espirituales son un método efectivo para purificarnos de forma que no tengamos miedo a ser nosotros mismos. A fluir como somos, con la certeza que cuando el corazón guía la acción es espontáneamente correcta, espontáneamente limpia.
Hoy busca un momento de este martes para sentarte y hacer tu práctica de meditación. Al finalizarla repasa por encima las ideas que hemos recorrido hasta ahora en el libro. Mira para adelante. No tienes que hacer nada, solamente dejarte fluir a través de este proceso de purificación. Se bueno, haz el bien..